Por: Psic. Clínica Ariana Ponce

La enfermedad de Alzheimer (EA) tocó las puertas de mi hogar de una forma desprevenida y nos llenó a mi familia y a mí de mucha incertidumbre y desconcierto, por lo que nos surgía una constante maraña de preguntas:
¿Qué puedo hacer? ¿Cómo puedo hacer frente a esta enfermedad? ¿Cómo me puedo comunicar? ¿Será que me escucha y que me entiende? ¿Sigue ella presente? Sin embargo, en aquel momento no obtuvimos respuestas y lo único que ocupó ese lugar fue el silencio, un silencio que crecía con el tiempo y nos distanciaba más de mi querida abuela Evelyn.